Una familia de osos que viven en Carolina del Norte, Estados Unidos, aprovecharon la cuarentena para ir a jugar a un parque infantil.
La mamá y cinco cachorros decidieron jugar ante las pocas personas que había en ese momento en las calles.
Tres de los cachorros se concentraron en la resbaladilla e intentar subirla, mientras que otro se columpiaba un rato y uno más estaba tranquilo.
La mamá se sentó a su lado y los observó pacientemente. Puedes ver el video a continuación.
Excelsior