Las historias de animales de terapia que ayudan a los seres humanos en distintos aspectos de sus vidas son ampliamente reconocidas, pues el apoyo de perros, gatos e incluso caballos es de gran importancia en los momentos difíciles.
Justo eso ocurrió en la Universidad de Maryland, en Baltimore, en donde una perrita Loki, una rottweiller de 5 años que recibió un diploma de “dogtorado” honorario de medicina por su labor durante la pandemia del covid-19, ofreciendo terapias virtuales a los contagiados.
Esta lomita se ganó el amor de los trabajadores y pacientes del hospital de Maryland, desde muy pequeñita, y es que, durante la crisis por la pandemia visitaba a los enfermos varios días a la semana y repartía kits de curación a las enfermeras.
Fue por esta razón que Bruce Jarrell, presidente de la Universidad de Maryland,elogió a Loki y Benzel, la humana de la peludita, por su trabajo y subrayó que su impacto fue tan significativo que llevó al hospital a expandir su programa de perros de terapia.